Llega la jubilación, ¿y luego?

El comienzo de un nuevo ciclo

Independientemente de nuestra edad, incluso desde pequeños, sabemos que la jubilación es una de las etapas que van a marcar nuestras vidas.

De niños, se suele asociar con los abuelos y la libertad de que disponen para que puedan pasar tiempo con nosotros.

En la etapa adulta, muchas veces se ve como algo que necesitamos que llegue pronto, agobiados por el trajín diario del trabajo, la familia y la sociedad.

¿Y qué sucede con quienes ya la reciben?

Surgen a la luz sentimientos encontrados.

Por un lado, llega el momento a partir del cual podemos dejar de lado gran parte de las obligaciones del día a día, o bien realizarlas a otro tiempo.

Por otro lado, está instalado en la sociedad el asociar el retiro laboral como «el comienzo de la fecha de caducidad», es decir, se empieza a ver en quien se retira (o está a punto de hacerlo) a una persona que no debería tener mayor actividad que la de ver pasar el tiempo.

Parte de ello también tiene que ver con la independencia de nuestros hijos que posiblemente ya tengan su propia morada, con su familia constituida o en proceso de ello, con el vacío que también se genera en casa por el hecho que lo anteriormente dicho genera.

Esta nueva etapa nos da la libertad de disfrutar más, seguir haciendo lo que nos gusta, reencontrarnos con amigos…

¿Nos jubilamos y se termina todo?

Si bien es natural que a medida que transcurren nuestras vidas se empiecen a hacer sentir con mayor asiduidad los síntomas del desgaste del cuerpo, esto no significa que hay que resignarse.

Es mi punto de vista que si bien se llega al final de un ciclo importante, también podemos celebrar el inicio de otro con igual o mayor importancia:

El de poder dedicarnos a nosotros.

Por supuesto como primer medida (incluso deberíamos tener la precaución de comenzar con bastante anticipación) el acompañamiento de nuestro médico es fundamental para conocer nuestras fortalezas y debilidades, en forma integral.

Siendo conscientes de esto,

¿Qué sería lo que no nos permite tomar la aventura que puede estar por venir?

Nuevamente un gran abanico de posibilidades

Estando en pareja, volver a descubrir la privacidad de la vida en común es todo un gran desafío, muchas veces sin darnos cuenta caemos en una rutina donde si bien los sentimientos siguen estando, lentamente se van perdiendo los pequeños detalles que antes se tenían.

El retomar esas pequeñas cosas no teniendo que lidiar con el despertador o las rutinas del trabajo es una tarea apasionante.

Por otro lado, gracias a la tecnología hoy hay ilimitadas posibilidades de comenzar nuevos desafíos o retomar aquello que en algún momento y por el motivo que sea tuvimos que dejar de lado (puedes ver más leyendo un artículo relacionado haciendo clic aquí)

Hay posibilidad de encontrar sobre cualquier cosa que nos interese, como ya sabemos.

Posiblemente una vez que pasamos los 50 vemos que hemos formado una familia, tendremos un grupo de amistades, un trabajo que nos ha permitido lograr y mantener lo anterior.

En este punto, y también a medida que vamos llevando más años encima, tendemos a decir que con lo que hemos conseguido nos sentimos plenos y no nos falta nada (salvo, posiblemente quienes por diferentes circunstancias no tengan una compañía de vida).

No está mal pensar así, todo lo contrario.

Solamente que muchas veces si indagamos un poco más profundo en nosotros, con sinceridad, puede llegar a surgir el «en realidad me gustaría….»

¿Y si probamos a hacer aquello que nos gusta y nunca nos animamos? Siendo conscientes de nuestra realidad y a nuestro ritmo lo podemos hacer…

Entonces, de ser así, ¿qué te estaría impidiendo hacer aquello que te haga sentir aún más pleno?

En mi caso particular, estando cerca de la edad de la jubilación (en realidad hace algo más de una década), me surgió esta inquietud, y desde entonces fui comenzando diferentes proyectos que siempre tuve en mente y siempre estaba «la excusa perfecta» para no hacerlo.

Quizás uno de los limitantes que más se escucha es el referido a la edad, donde se tiende a asociar el querer estar bien con el síndrome del eterno joven (te dejo éste enlace para que leas otro artículo referido a este tema, haz clic aquí)

Empecé a tomar algunos cursos (en principio breves), inicié actividad deportiva (cosa que sigo haciendo), y sigo tratando de crecer en todos los aspectos, sin descuidar a mi familia.

Al contrario de lo que podría suponerse, el encontrar tiempo y espacio para seguir creciendo me permite estar más cerca de mis afectos, me di cuenta que me despeja la mente y puedo estar en casa sin traer los malestares del trabajo o de la calle.

¿Y cuál es tu opinión al respecto?

¿Ya has tomado decisiones para seguir creciendo?

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El planeta de los simios, seguimos en él?.

La fantasía se parece cada vez más a la realidad.

¿O es al revés?

En otro artículo (puedes leerlo haciendo click aquí) comenzamos a hablar de ésta novela y lo similar que encontramos a diario, sin necesidad de viajar a otros mundos imaginarios.

En la nota anterior nos referimos a algunos profesionales que tratan siempre los mismos problemas en la sociedad y en lugar de proponer nuevas soluciones solamente se remiten a reescribir lo ya escrito, cambiando solamente lagunas palabras, el contenido y el mensaje permanece igual

Hoy me viene a la mente en particular una de las clases:

Los gorilas

Los gorilas son la clase dirigente: ocupan cargos políticos, militares, empresariales y posiblemente aristocráticos (se especula que en los albores de la civilización simia usaron la fuerza física para someter a las otras razas), tienen aptitud para liderar y administrar, son arrogantes, impetuosos y poco intelectuales. Según Mérou «los gorilas a veces escriben libros, pero se preocupan más por el continente que por el contenido». (Vuelo a repetir un pasaje de la novela «El planeta de los simios)

¿Y qué tiene que ver con nosotros, te preguntarás?

Mucho más de lo que pudiera parecer.

En estos últimos meses los acontecimientos en Europa me hicieron recordar el párrafo indicado arriba, un entramado político-económico-militar que tiene al mundo nuevamente en vilo.

Dirigentes políticos con ansia de poder, que bajo diferentes excusas buscan «demostrar su grandeza», inventando enemigos donde, en la mayoría de los casos, no existen como tal.

Es mi entender que, a diferencia de lo expresado en la novela respecto de su capacidad intelectual, no se los puede menospreciar en este aspecto.

Hay motivos políticos, económicos, etc., etc., etc., dirán algunos para seguir justificando las actitudes belicosas.

Mi humilde opinión es, que de ser cierto, existen formas pacíficas de cambiar estas amenazas, en caso de ser ciertas.

Sin ir más lejos, Gandhi o Nelson Mandela son ejemplos donde se logró cambiar una situación adversa verdadera a otra de equilibrio, sin necesidad de derramamiento de sangre o invasiones a otros pueblos o países.

Una situación que vemos a diario mucho más de lo que creemos

En la sociedad estamos viendo muchos cambios para bien, y estamos logrando cambiar nuestros modelos mentales para bien de todos.

Desgraciadamente hay aspectos que todavía los tenemos internalizados y los tomamos como «comunes», más allá del comentario sorpresa de un primer momento.

Al día de hoy casi está naturalizado el conflicto Rusia-Ucrania, donde solamente tengo en cuenta para ubicar el orden de los países por lo que se conoce respecto de quién parece ser quien ha comenzado el conflicto, sin otra razón aparente que anticiparse a posibles acciones que los podría perjudicar.

Es decir, utilizan el viejo dicho que dice que «la mejor defensa es un buen ataque».

Lo mismo sucede en diferentes partes del mundo y por diferentes supuestas razones: políticas, económicas, religiosas o cualquier otro motivo que quiera justificar el uso de la fuerza.

Como vemos, se cumple lo expresado en la novela: «Los gorilas son la clase dirigente: ocupan cargos políticos, militares, empresariales y posiblemente aristocráticos (se especula que en los albores de la civilización simia usaron la fuerza física para someter a las otras razas), tienen aptitud para liderar y administrar, son arrogantes, impetuosos.

Lo triste en la actualidad no son ellos los que directamente ponen el pecho, sino que utilizan a terceros, un acto de cobardía pues envían a otros a realizar lo que posiblemente no serían capaces de hacer en forma personal.

Hecho totalmente repudiable, ahora, hace siglos o en el futuro próximo o lejano.

Como dijimos, nada nuevo, sí muy cercano.

Esto me hace recordar al bullyng, donde «el que se cree mayor o más poderoso» incomoda y violenta a quien siente que lo molesta ó cree que simplemente tiene del derecho de agredirlo.

Como sucede en el colegio o en las calles, los principales países, muchas veces por intereses económicos, en voz baja critican la pelea mientras forman un círculo alrededor de los contendientes gritando «pelea, pelea, pelea…»

Sinceramente lamentable, desde mi punto de observación.

Está en nosotros colaborar a cambiar la actitud de la sociedad

A nivel de sociedad se está tratando de erradicar éstos tipos de violencia.

Lo extraño es que el ejemplo suele salir desde quienes son referentes a nivel mundial: políticos, religiosos, empresarios, y todos quienes tienen influencia a nivel mundial.

Haz click aquí para leer una nota referida al respeto que todos nos merecemos.

Por un lado se trata de bajar el nivel de violencia, y por el lado de los grandes referentes se trata de demostrar que lo principal es dominar, no evolucionar.

Éste es un tema que nos compete a todos, pues nosotros, al igual que nuestros padres, nuestros abuelos antes, y quienes los precedieron, somos los responsables de la educación de nuestros hijos, para conseguir que la roca donde habitamos sea un lugar más acogedor cada día.

Te dejo aquí el enlace a un artículo para que vas algo más respecto al tema educación de nuestros hijos

Resumiendo

Si bien actualmente hay sucesos a nivel mundial que pueden estar fuera de nuestro alcance solucionar (o quizás no estén tan lejos de nuestro alcance), sí está en nosotros poder lograr un cambio de aquí en más, es todo tan simple como el mensaje y ejemplo que demos a nuestros descendientes.

En definitiva, tratar de salir de El Planeta de los Simios. Por supuesto hablo de los simios de la ficción, pues los que conviven en nuestro planeta demuestran ser mucho más humanos que muchos de nosotros.

¿Estás de acuerdo con ello?

Cuál es tu propuesta para lograr un lugar más agradable dónde vivir?

Qué acciones estás tomando para que ello sea posible?

Deja tus comentarios al respecto, tanto si estás de acuerdo como si no.

Puede ser tu granito de arena para empezar un gran cambio a futuro.

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Reunión de amigos

Un breve cuento para reflexionar

Les dejo un breve cuento de humor que circula por las redes, no conozco el autor.

Antes que nada, por favor tomarlo como lo que es, un cuento para sacar una sonrisa, sin ánimos de ofender a nadie.

LA FIESTA DE CACHO

Cacho, un señor de 86 años, le dice a su hijo:
-Nene… (el nene tiene 62 años).

-Si papá dime.

-Quiero hacer una reunión con los muchachos y me gustaría que me ayudaras a organizarla
-Claro papá, tranquilo que yo te lo arreglo todo.

-Arreglar qué???

-La fiesta papá!!!

-Ah siiii!!! Ya se me había olvidado!

Esa tarde el hijo llama al padre a la cocina, y le muestra un papel pegado en la heladera:

1- Servir café
2- Servir sandwiches
3- Servir tragos
4- Servir torta
Qué bien!!! ahora no tendré problemas!!!…
Gracias nene!

Esa tarde llegan las «muchachos » ninguno bajaba de los 85!
Cacho, buen anfitrion, los pasa al comedor y se va a la cocina.

Lee :

  1. Servir café
    Y les lleva café a sus amigos.

Al rato de conversar, Cacho nervioso va a la cocina y lee otra vez:

  1. Servir café
    Y les sirve más café…

Así 4 veces.
Por fin los muchachos se van.

Una de ellos le susurra a otro mientras salen del edificio:

-Tito, has visto? Que mal anfitrion es Cacho!!! No nos ha dado ni un café!!!
Tito, le responde:

  • Cacho? De qué Cacho me hablas???

Esa noche el hijo de Cacho llega a la casa de su padre y se asombra, al ver que los sandwiches, los tragos y la torta están intactos y le pregunta:

Papá.. ! Qué ha pasado???

Cacho le responde: -Podrás creer que estos cabrones no han venido???!!!

Moraleja:
¡¡¡REUNÁMONOS AHORA, QUE TODAVÍA NOS RECONOCEMOS!!!

Mándaselo a tus amigos, antes de que te olvides quiénes son.

¡FELIZ DIA DE LA JUVENTUD ACUMULADA!

Me lo acaba de enviar y amigo pero no recuerdo quien fue.. (espero que no hayas sido tú…)

Es solamente a los efectos de reflexionar

Como expresé al principio de la nota, no hay ninguna intención de ser ofensivo ni discriminatorio.

Desde la primera vez que lo leí, y cada vez que me llega, lo que siempre me hace aterrizar es la frase

¡¡¡REUNÁMONOS AHORA, QUE TODAVÍA NOS RECONOCEMOS!!!

Para quienes pasamos los 50 (yo hace 10 que los he pasado), más allá de la parte humorística, y ahora hablo en mi caso particular, resulta ser un gran motivador, nos recuerda que todos tenemos la fecha de vencimiento anotada en nuestro envase (solamente que la tenemos oculta).

Ahora bien, si interpretamos la moraleja, podemos tomarla de 2 posibles formas:

  • Utilizando la teoría del vaso medio vacío
  • Utilizando la teoría del vaso medio lleno

La mayor parte del tiempo dejamos cosas para hacer «más adelante, cuando no estemos tan ocupados y tengamos tiempo».

Puede aplicar a cualquier tema:

  • Dedicarnos más a la familia
  • Tomarnos tiempo para nosotros
  • Dedicarnos a algo que nos apasione
  • Econtrarnos con los amigos

Siempre está la excusa dando vueltas (haz click aquí para ver más al respecto)

También tenemos el caparazón de la edad (te invito a leer la nota «No tienes edad para eso» haciendo click aquí)

De las 2 teorías indicadas más arriba, a mí en lo personal me agrada utilizar la segunda

¿Por qué, te preguntarás?

Si bien las 2 formas pueden expresar lo mismo, es muy diferente enfocarse en lo que SÍ podemos hacer a lamentarse por lo que dejamos pasar.

Siempre estamos a tiempo:

  • De reencontrarnos con nuestros afectos (que posiblemente por el afán de querer brindarles todo lo material que necesitaran para estar bien dejamos un poco de lado lo afectivo, tanto o más importante que lo primero)
  • De encontrar un momento en la semana para dedicarnos a nosotros
  • De comenzar esa actividad que siempre quisimos y venimos postergando
  • De reunirnos con amigos

En lo personal, puedo decir que periódicamente nos encontramos con mis compañeros de escuela secundaria, un tiempo que nos hace bien a todos los que nos reunimos. Y hace bastante tiempo que no nos vemos, alguien del grupo nos envía el cuento de Cacho…

También aprendí a encontrar el tiempo para realizar actividades que me gustan, y descubrir otras interesantes.

¿Y tú, ves el vaso medio vacío o medio lleno?

Hazme saber tu punto de vista en los comentarios, son muy bienvenidos, y también serán de ayuda a quien pudiera necesitarlo.

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¿Has perdido la motivación?

Esto entonces es para ti

Si te digo «Síndrome del Nido Vacío», es muy probable que sepas a qué se refiere.

Se aplica a los padres cuando llega el momento en que los hijos de van de casa, y la sensación de vacío que ello genera.

También he notado que luego de los 50 años se puede dar un concepto similar, aunque, como en mi caso, esté llegando a los 60, con hijos que de momento siguen su carrera estudiando y en casa.

Con un trabajo en el que estoy a gusto, una familia por la cual «seguir corriendo » (en el buen sentido y con mucho placer, por supuesto).

Sin embargo, un día me di cuenta que había algo que me tenía «atrapado»:

Si bien estaba ocupado, había perdido la motivación de avanzar.

Estaba actuando «en modo piloto automático».

¿Qué había sucedido?

Pasó casi sin darme cuenta, hasta que una tarde vi todo de forma bastante clara:

  • Me sentía como que me faltaba algo (el no poderlo definir me ponía en cierta forma triste, además del sentimiento de vacío que a veces me abrazaba)
  • No tenía ni rumbo ni proyectos para hacer, salvo lo que ya venía haciendo en modo automático
  • Por momentos, en los ratos en que los ocupaba para descansar, me sentía aburrido
  • Lo peor, ya «me empezaba a sentir viejo» y lo estaba tomando como algo natural e inevitable

Todo muy similar a lo que se describe como el Síndrome del Nido Vacío, aunque con los pichones todavía en el nido.

Gracias a un desafío que me planteó mi hijo (haz clic aquí para ver la nota donde explico de qué se trata), pude encontrar un camino para salir de donde estaba estancado.

Hay buenas noticias

Si bien es un estado en el que, una vez dentro, puede resultar difícil encontrar un camino de salida, hay cosas en las que nos podemos enfocar para ir recuperando calidad de vida.

  • Redirigirnos y buscar nuevas expectativas
  • Mantenernos en contacto con amigos y familiares, ya sea por llamadas, o salidas con ellos
  • Ser positivo
  • Buscar apoyo de sentir que no podemos con ello (sin sentir vergüenza por ello, es lo peor que podemos hacer)

En definitiva: Buscar nuevas oportunidades.

Como indiqué más arriba, lo que sentía estaba más allá de mi realidad laboral y falmiliar.

En lo laboral, necesito mantenerme activo y actualizado en forma constante.

En lo familiar, tengo una compañera espectacular, y de mis hijos nada que objetar, todo lo contrario.

Se dio en el aspecto personal, vi que estaba descuidando mi integridad, lo que más tarde o más temprano puede llevar a afectar el resto.

Conclusión

Necesitamos encontrar lo que nos permita recargar energías y vitalidad, en actividades que nos hagan sentir plenos, tanto a nivel mental como físico, y no «sentirnos viejos», por supuesto siempre teniendo en cuenta nuestras realidades (puede leer más la respecto haciendo clic aquí)

Puede ser una actividad física, aprender algo nuevo, desarrollar esas habilidades que sabemos que tenemos y nunca nos permitimos hacerlo).

De esto se trata Ser Perennial, elegir seguir creciendo en lugar de simplemente envejecer.

Consultar a tu médico y una buena alimentación son fundamentales (haz clic aquí para leer más al respecto)

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Nos encontramos.

Adolescencia tardía y nuestra intimidad

Ventajas y desventajas de los avances de la ciencia

Más allá de los inconvenientes que surgen en el día a día, somos protagonistas de grandes avances en todos los aspectos de nuestra vida, en cantidad y calidad, con un ritmo que hasta el momento no se había registrado.

Son cambios que se observan en todos los aspectos:

  • Salud
  • Tecnología
  • Sociedad

La combinación de estos tres puntos trae aparejada mejoras sustanciales en lo que respecta a calidad de vida en general.

Uno de los hechos más destacables es llegar a superar la barrera de los 50 años gozando de un estado de salud y vitalidad impensadas hace no más de 20 o 30 años.

Este incremento es bastante uniforme en todos los rangos de edades, a tal punto que hoy en día se están corriendo los márgenes hasta cuándo dura la adolescencia.

Como consecuencia, y también en parte por nuestro interés en que nuestros hijos puedan tener un mejor futuro (vía estudios) se va retrasando el momento en que toman el camino de su independencia y deciden vivir en su propio hogar.

Pero todo tiene un lado inconveniente:

Se da el caso que no terminan nunca de decidir construir su propio camino, con lo que siguen estando con nosotros.

Luego surge, sobre todo en nosotros los mayores, sentimientos encontrados:

  • Por un lado queremos que sigan en casa.
  • Por otro, hay momentos en que se siente necesaria cierta intimidad con la que se piensa «para cuando los chicos sean grandes y tengan su propio hogar».

Al hablar de intimidad me refiero a cualquier tipo de actividad que queramos realizar, sin preocuparnos respecto de horarios o planes.

Es un tema del cual se ha hablado y se habla mucho, en casi todos países del mundo, en mayor o menor grado.

La extensión del período adolescente les permite tomar determinados riesgos que pueden estar en contra de nuestro deseo de intimidad con nuestras parejas

Esto es bueno o es malo?

Es una pregunta cuya respuesta no está cerrada todavía, ya que tiene opiniones a favor y en contra.

Como puntos positivos podemos citar:

  • El apoyo que les podamos brindar les permite una mayor libertad a la hora de realizarse (por ejemplo tienen mejor identificados los contextos laboral y personal por lo que no necesariamente deben atarse a un trabajo que no los satisfaga).
  • No tienen inconvenientes en buscar oportunidades laborales en sitios lejos de su hogar.
  • Las relaciones de pareja las toman de forma diferente, cambiando el concepto de «para toda la vida»…

Como contrapartida, lo pueden realizar a sabiendas que en casa siempre habrá un lugar «por cualquier contingencia», por lo que se está expuesto a perder esa intimidad de la que hice referencia al inicio de la nota.

Somos entonces culpables de que pueda suceder algo que en el fondo no deseamos?

Más que de hablar de culpas me parece mas lógico hablar de «responsables».

¿Qué quiero decir con esto?

Aunque parezca una obviedad, sabemos que nunca los vamos a dejar librados a su suerte, siempre estará nuestro apoyo, en las buenas o en las malas.

Lo que muchas veces no hacemos es expresar claramente nuestras inquietudes a futuro, indicándoles que es su responsabilidad tomar su propio camino, y que deben asumir los resultados, sean buenos o malos, de la misma forma que nosotros lo hemos hecho en su momento (por supuesto que sabemos que aunque no se lo digamos las puertas siempre estarán abiertas).

Resumiendo

Está en la forma en que guiemos a nuestros hijos (sobre todo con el ejemplo) para que todos, de forma tranquila podamos disfrutar nuestra intimidad sin perder los vínculos familiares.

Dejemos claro estos aspectos para una mejor calidad de vida familiar.

Si tienes alguna duda o consulta, y si te ha gustado la nota házmelo saber en los comentarios.

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