Un trágico inicio, una lucha incansable
En esta fecha tan significativa, el Día Internacional de la Mujer, permítanme rendirles un merecido homenaje y compartir algunas reflexiones desde mi corazón. Conmemoramos un hecho trágico ocurrido hace más de un siglo: el devastador incendio en la fábrica Triangle Shirtwaist de Nueva York en 1911. Aquel siniestro cobró la vida de 146 trabajadoras, en su mayoría jóvenes inmigrantes, que luchaban por sobrevivir en condiciones infrahumanas. Fue un suceso que estremeció las conciencias y catalizó cambios en los derechos laborales de las mujeres.
Conquistando libertades: Un camino de perseverancia
Pero lejos de ser un recordatorio sombrío, esta fecha es también una celebración de los inmensos avances que ustedes, incansables luchadoras, han logrado conquistar a lo largo de generaciones de lucha, valentía y perseverancia. Hoy, las mujeres pueden votar, ocupar cargos de poder, acceder a educación, divorciarse y muchas otras libertades que antes les fueron negadas. Son madres, profesionales, emprendedoras, políticas, artistas, deportistas… Rompen techos de cristal y expanden los límites de lo que se considera «roles femeninos».
Desafíos persistentes: La lucha continúa
Sin embargo, el camino no ha sido fácil ni está completamente recorrido. Persisten desigualdades, brechas salariales, violencia machista, falta de representación en algunos ámbitos y esa terrible lacra que es el edadismo, que menosprecia y descarta a mujeres talentosas sólo por tener una determinada edad. Esa discriminación por edad que enfrentan muchas profesionales y empresarias mayores de 40 años es inaceptable. Después de tantos años aportando su experiencia, compromiso y sabiduría al mundo laboral, ninguna mujer debería pasar por ese injusto y doloroso rechazo.
Reinventarse y encontrar el propósito
Pero las conozco, son guerreras y su fuerza es inagotable. Así como un día emprendieron la aventura de ser madres y profesionales, de luchar por sus derechos, hoy se reinventan y diseñan una nueva etapa acorde a sus anhelos y habilidades. Las admiro profundamente porque, al igual que en mis servicios de coaching, aprovechan esta coyuntura para descubrir sus verdaderos talentos y propósitos. Lejos de darse por vencidas, exploran nueva sendas que las conduzcan a una plenitud personal y laboral renovada.
Celebrando la resiliencia y determinación femenina
En este Día de la Mujer, celebro sus logros, pero también su indómita capacidad de soñar y hacer realidad esos sueños. Celebro la perspicacia de verse a sí mismas con una mirada compasiva y amorosa que les permite saberse merecedoras de una vida plena y feliz. Celebro su resiliente determinación de no estancarse, de aprender a vivir esta nueva etapa como una transición, no un final. De mantener esa llama interior que las impulsa a crecer, inspirar y transformar sus vidas y las de quienes las rodean.
Avanzando juntos hacia la equidad y realización
Sigamos avanzando juntos y juntas por ese camino de equidad, respeto y realización genuina. Que su luz ilumine con esperanza el sendero que aún nos queda por recorrer. Ustedes son la fuerza motriz que seguirá moviendo las montañas del cambio.
Feliz Día Internacional de las Mujeres a cada una de ustedes, luchadoras invaluables. Les rindo mi más profunda admiración. Comparte esta reflexión con otras mujeres inspiradoras en tu vida, déjanos tus comentarios y suscríbete a nuestro blog para más contenido enriquecedor. Y si necesitas apoyo para descubrir tu propósito y reinventarte en esta nueva etapa, no dudes en enviarme un mensaje. Estoy aquí para acompañarte en ese emocionante viaje de crecimiento y realización personal.
