𝙀𝙡 𝙚𝙨𝙥𝙚𝙟𝙞𝙨𝙢𝙤 𝙙𝙚 𝙡𝙖 𝙦𝙪𝙚𝙟𝙖
¿Alguna vez te has encontrado quejándote de la falta de oportunidades laborales después de los 45?
Sí, yo también lo he hecho. Es fácil caer en la trampa de culpar al edadismo por nuestras frustraciones profesionales.
Pero, ¿y si te dijera que la queja es solo un espejismo que nos aleja de nuestro verdadero potencial?
𝙇𝙖 𝙧𝙚𝙖𝙡𝙞𝙙𝙖𝙙 𝙞𝙣𝙘ó𝙢𝙤𝙙𝙖
Vamos a ser honestos: el edadismo existe.
Es real y es injusto.
Pᴇʀᴏ ᴀqᴜí ᴇꜱᴛá ʟᴀ ᴠᴇʀᴅᴀᴅ ɪɴᴄóᴍᴏᴅᴀ: quejarnos no va a cambiar nada. De hecho, cada minuto que pasamos quejándonos es un minuto que no estamos usando para crecer, adaptarnos y superar estos obstáculos.
𝙀𝙡 𝙥𝙤𝙙𝙚𝙧 𝙙𝙚 𝙡𝙖 𝙖𝙘𝙘𝙞ó𝙣
Imagina que estás frente a dos puertas. Una dice «Quejas» y la otra «Acción».
¿Cuál eliges?
La puerta de las quejas te llevará a un círculo vicioso de frustración. La puerta de la acción, aunque más desafiante, te conducirá hacia el crecimiento y las oportunidades que anhelas.
𝙍𝙚𝙞𝙣𝙫𝙚𝙣𝙩𝙖𝙧𝙨𝙚: 𝙚𝙡 𝙨𝙪𝙥𝙚𝙧𝙥𝙤𝙙𝙚𝙧 𝙙𝙚 𝙡𝙤𝙨 40+
¿Quién dijo que no puedes reinventarte después de los 45? Tu experiencia es tu superpoder. Tienes décadas de conocimiento que los más jóvenes solo pueden soñar. La clave está en cómo lo presentas y cómo lo aplicas a las necesidades actuales del mercado.
𝘿𝙚 𝙡𝙖 𝙦𝙪𝙚𝙟𝙖 𝙖 𝙡𝙖 𝙚𝙨𝙩𝙧𝙖𝙩𝙚𝙜𝙞𝙖
En lugar de quejarte de las puertas cerradas, ¿qué tal si empiezas a construir tu propia puerta? Desarrolla nuevas habilidades, network estratégicamente, crea contenido que demuestre tu experiencia. La estrategia vence a la queja todos los días de la semana.
𝙀𝙡 𝙢𝙞𝙣𝙙𝙨𝙚𝙩 𝙙𝙚𝙡 𝙘𝙧𝙚𝙘𝙞𝙢𝙞𝙚𝙣𝙩𝙤 𝙘𝙤𝙣𝙩𝙞𝙣𝙪𝙤
Adopta un mindset de crecimiento continuo.
Cada «no» es una oportunidad para aprender y mejorar.
Cada rechazo es un paso más cerca de tu próximo «sí».
No dejes que tu edad defina tu potencial; deja que tu actitud lo haga.
𝙇𝙖 𝙩𝙧𝙖𝙢𝙥𝙖 𝙙𝙚 𝙡𝙖 𝙞𝙣𝙖𝙘𝙘𝙞ó𝙣: 𝙐𝙣𝙖 𝙝𝙞𝙨𝙩𝙤𝙧𝙞𝙖 𝙧𝙚𝙖𝙡
Permíteme compartirte algo que veo con frecuencia en mi práctica de coaching. Recibo mensajes de profesionales frustrados, sintiendo el peso del edadismo en sus carreras. Acordamos una sesión de descubrimiento, gratuita y sin compromiso. Llega el día y… no se presentan. O peor aún, se conectan, escuchan sobre el proceso de transformación y retroceden al comprender que no hay soluciones mágicas.
¿Te suena familiar? Es la trampa de la inacción.
Deseamos el cambio, pero cuando se nos presenta la oportunidad de dar el primer paso, nos paralizamos.
¿Por qué?
Porque el cambio real requiere esfuerzo, compromiso y, sí, enfrentar nuestros miedos.
Pero aquí está la verdad: esos que dan el paso, que se comprometen con su crecimiento, son los que terminan reinventando sus carreras y sus vidas. No porque sea fácil, sino porque entienden que el verdadero obstáculo no es su edad, sino su disposición a actuar.
𝙇𝙖 𝙖𝙘𝙘𝙞ó𝙣 𝙘𝙤𝙢𝙤 𝙖𝙣𝙩í𝙙𝙤𝙩𝙤
La acción es el antídoto perfecto contra el veneno de la queja. Cada paso que das, por pequeño que sea, te aleja de la frustración y te acerca a tus metas. ¿Qué acción concreta puedes tomar hoy para avanzar hacia tus objetivos profesionales?
Recuerda, no se trata de dar un salto gigante de inmediato. Se trata de pequeños pasos consistentes. Tal vez sea actualizar tu perfil de LinkedIn, inscribirte en un curso online, o simplemente comprometerte a una sesión de coaching y cumplir con ella. Cada acción cuenta.





Toma acción, deja la queja.
𝙏𝙪 𝙛𝙪𝙩𝙪𝙧𝙤 𝙚𝙨𝙩á 𝙚𝙣 𝙩𝙪𝙨 𝙢𝙖𝙣𝙤𝙨
Tu futuro no está determinado por tu edad, sino por tus acciones. Eres el autor de tu historia profesional.
¿Quieres ser el protagonista que se queja de su suerte o el héroe que supera todos los obstáculos?
La elección es tuya. Puedes seguir quejándote del edadismo o puedes usar tu experiencia como una ventaja competitiva. Puedes lamentarte por las oportunidades perdidas o puedes crear nuevas. Puedes temer al cambio o puedes abrazarlo como una oportunidad de crecimiento.
¿Estás listo para dejar atrás las quejas y abrazar la acción? Si quieres descubrir cómo transformar tus desafíos en oportunidades y diseñar una vida profesional plena después de los 45, envíame un mensaje. Juntos, podemos crear un plan de acción personalizado que te lleve del deseo al logro.
Pero recuerda, este es solo el primer paso. El verdadero cambio comienza cuando te comprometes contigo mismo a seguir adelante, sin importar los obstáculos. No esperes más, tu futuro empieza hoy. ¿Estás listo para pasar de la queja a la acción? La puerta está abierta, solo tienes que dar el primer paso.
